ASOMOS – EL COMIENZO
TESTIMONIO I EL COMIENZO PARTE Ipareció que trepaba. Sonriendo, bajé mis ojos y sentí un gozo envidioso de la placidez que contemplaba. Ni un rumor, ni la sombra de un ruido en la noche que recién comenzaba. Todo estaba en silencio, hasta los montes parecían estar durmiendo. Semejante quietud avivó mi fatiga, había sido un día […]