“(…) La religión determinó muchas de las características del arte barroco que fue básicamente religioso. La iglesia católica se convirtió en uno de los mecenas más influyentes, y la Contrarreforma, que quería combatir la difusión del protestantismo, contribuyó a la formación de un arte emocional, dramático y naturalista, con un claro sentido de propaganda de la fe. La temática tratada, por tanto, será casi exclusivamente religiosa. En España predominan las imágenes religiosas talladas en madera (imaginería) que posteriormente se policroman. Entre los trabajos más destacados están los retablos para altares de iglesias donde aparecen figuras exentas y en bajorrelieve. El cliente más importante es la Iglesia y en segundo lugar la Corte (…).