TRES VECES (Microcuento de ficción teológica) por José Luis Najenson. Escritor y poeta

“Y le dijo Jesús: De cierto te digo que tú, hoy, en esta noche, antes de que el gallo haya cantado dos veces, me negarás tres veces. (S. Marcos XIV-30”
Debido a una visión, el Papa Cipriano I, de origen albanés -cuyo nombre fue tomado de San Cipriano* y ordenado en 2666- marchó a Jerusalén ese mismo año para pasar allí la Semana Santa. Fue alojado, con un séquito de cien personas, en el emblemático Hotel Rey David.
La noche del Viernes Santo Cipriano I fue capturado en sus habitaciones por un desconocido con poderes sobrenaturales. El Comandante de la Guardia Suiza, que lo acompañaba en su viaje, acudió a su llamado tratando de irrumpir en la suite, pero no pudo traspasar el umbral. Poco después, la Guardia atacó con gases, también a pedido de Su Santidad, pero todo fue en vano. El Sábado de Ramos, los magos, brujos y quiromantes de la Corte Pontificia, con el consentimiento del Papa, ejercieron inútilmente sus talentos.
