El prólogo de los juglares
Un camino de Santiago, testigo del pisar alegre, triste, melancólico. Caminantes que buscan perdón recorriendo la senda. Hombres que encuentran cobijo, que se esconden, de pies doloridos, ligeros, pesados, de pasos largos y cortos.
Un camino de Santiago que reproduce el cantar de los juglares. Peregrino escucha el silencio, regocíjate en ese momento inhóspito, tiempo que cubre el tiempo de los sonidos de un laúd, de un tamboril, o una flauta.
Las Cantigas del rey Alfonso X, en lengua “galaico portuguesa” eran el deleite de peregrinos de tiempos pretéritos, poder escuchar los milagros y leyendas, recitados por trovadores en las plazas de esas hermosas villas.
El romero de Santiago.
“Non é gran cousa”

Es uno de los relatos más conocidos del Camino de Santiago. En el siglo XIII se le denominaba “el gran milagro” y tenía una fiesta especial en la catedral de Santiago de Compostela. Aparece en el Liber Beati Jacibi atribuido a Anselmo de Canterbury.
Un peregrino que iba a Santiago peca contra la castidad y el diablo tomando la figura de Santiago se le aparece y le indica que para salvarse ha de mutilarse el órgano con que pecó y degollarse. El romero lo hace de buena fe y muere. El auténtico Santiago entra en disputa con el diablo que quiere llevarse el alma del peregrino. La Virgen “abogada en el Tribunal del Paraíso”, sentencia la resurrección del romero, que nunca pudo recobrar aquello de lo que se privara”.
El peregrino ahorcado.
“Por dereito ten a Virgen”
“Es el más divulgado de los milagros del Camino de Santiago y sucedió en Toulouse en el año 1090. En el Liber Beati Jacibi se le atribuye a Calixto II.
Un romero alemán devoto de Santa María viajaba con su hijo por Rocamador hacia Santiago de Compostela. Un malvado y hereje posadero introdujo secretamente un vaso de plata en el saco del hijo. Delatado y descubierto, un juez mandó ahorcar al mozo delante de su desolado padre, que llorando continuó su prometida peregrinación. Pasados tres meses, de regreso fue a ver a su hijo colgado y muerto, descubriendo que aun vivía porque Santa María le sostuvo ese tiempo con sus manos. La gente indignada buscó al posadero hereje, que al confesar su culpa fue quemado en la hoguera”.
Cuantas y bellas historias guarda el camino de Santiago. Contaré mi humilde viaje en solitario cruzando tierras asturianas y gallegas, para llegar a Santiago.
Suman 12 relatos, como los 12 apóstoles, las 12 Tribus de Israel, los 12 dioses y titanes del Olimpo, los 12 Caballeros de la Mesa Redonda, los 12 Pares de Francia del Rey Carlomagno, los 12 asnos del cielo de los dioses germanos, los 12 fundamentos o bases de la muralla del Nuevo Jerusalén, las 12 perlas, las 12 puertas, los 12 ángeles que protegen las puertas, los 12 veces 12.000 hombres que vivirán en la ciudad sagradas, las 12 tareas de Heracles, los 12 compañeros de aventuras de Sigfrido y mil veces 12.
12 días, 460000 pasos sobre el camino primitivo de Santiago.
Quien va a Santiago y no al Salvador

Oviedo antiguo vestido de domingo bucólico, lluvia con cadencia incide sobre un suelo eternamente mojado.
Gotas de mayor a menor tamaño, dibujan círculos concéntricos de diámetros, los primeros pequeños a grandes e infinitos los últimos. Lemiscata, baile de ondas sobre un gran charco en la plaza del ayuntamiento.
Arco casado en segundas nupcias con su bóveda, puerta del tiempo que da paso a Cimadevilla, vía de antaño, calle del medievo.
Atravieso atolondrado ese umbral, deleitándome con la luz que transporta las siluetas de siglos pasados. Estructura que recorro en braille con mis dedos imaginarios.

Escucha los chirridos de los carros y las voces guardadas en un bote afecto a otra época. ¿ No oyes las conversaciones de los espíritus que deambulan por ese lugar? se niegan a abandonar la calle.
La catedral de san Salvador, la cámara santa, construcciones unidas a espacios de tiempo anteriores, gótico el primero y prerrománico el habitáculo contenedor de las reliquias, todos entrelazados, Dios y reyes, pueblo llano, cruz de los Ángeles y de la Victoria.
Peregrinos, “quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y deja al Señor”. Inscripciones se escuchan, dictadas de siervo a siervo, de señor a señor, rebotan los sonidos contra las paredes que integran la plaza, susurros que enseñan la historia, el origen, el camino.

Liber Testamentorum Ecclesiae Ovetensis.
“Quien quiera que contemple este templo honrado por el culto de Dios, conoce que anterior a éste hubo aquí otro, dispuesto del mismo modo, siendo fundado por Froila siervo del Señor Salvador, ofreciendo doce altares a los doce apóstoles; en cuyo favor sea piadosa vuestra oración hacia Dios, para que os de el Señor digna recompensa. Este edificio anterior fue parcialmente destruido por los paganos y profanado por los herejes, por lo que fue enteramente fundado de nuevo por el siervo de Dios Alfonso y renovado para su mejora. A él, Cristo, séale dada la gracia por tal labor y a Ti, aquí, alabanza incesante sin fin”.
Nota aclaratoria: Primer día del camino primitivo, salida desde Oviedo, la catedral de San Salvador.



He leído con gran interés su artículo sobre CAMINO
DE SANTIAGO (I PARTE) por Xavier Eguiguren – LA ALCAZABA y puedo decir que es uno de los mejores artículos que he leído.
Es por eso que quiero compartir un sitio web que me ha ayudado mucho a perder peso, y ahora estoy feliz de nuevo:
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